La candidata al gobierno del estado de Puebla por la coalición Por México al Frente, esposa del exgobernador Rafael Moreno Valle, gastó alrededor de 10,900 pesos por hora durante el periodo de precampañas.
Según el informe del Instituto Nacional Electoral (INE), la también exsecretaria general del Partido Acción Nacional (PAN), fue la que más gastó para promover su imagen y ganar el voto del electorado poblano. Facturó la cantidad de más de 2 millones de pesos, es decir 25 por ciento más de lo que reportó en un principio.
El monto autorizado para la candidata del PAN-PRD-MC ascendió al 72 por ciento del presupuesto total de las precampañas, esto sumando los montos de los otros dos candidatos, Luis Miguel Barbosa Huerta por la coalición Juntos Haremos Historia y Enrique Doger del PRI (Partido Revolucionario Institucional).
Si así gastó en las precampañas, no nos queremos imaginar la cantidad de dinero que derrochará durante la campaña y peor aún si llega a ser gobernadora.
¿Puebla necesita una dirigente que gaste en exceso y en caprichos? Esta mujer se gasta el dinero como si fuera suyo, no tiene límites.
He ahí el dilema: un voto por la señora Alonso, es un voto por Moreno Valle.
Fuente: urbanopuebla.com.mx